Escrito por la Dra. Natalia García.
¿Te sangran las encías cuando te cepillas los dientes?, ¿tienes sensibilidad dental con los cambios de temperatura? o ¿te duelen los dientes al masticar los alimentos? Mucho cuidado porque estamos ante un cuadro inequívoco de síntomas de periodontitis o piorrea. Sigue leyendo que te contamos todo lo que necesitas saber.
¿Qué es?
La piorrea es el nombre más popular de la periodontitis. De hecho, es la forma más grave de las patologías periodontales provocada por la inflamación de las encías o gingivitis. Si recordáis en post anteriores, ya hemos hablado tanto de la periodontitis como de la gingivitis y que repasamos a continuación.
Según la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA), en España el 25,4% de la población de entre 35 y 44 años padece piorrea. Este porcentaje aumenta conforma la persona va envejeciendo.
La consecuencia última de esta afección es la pérdida del diente ya que el hueso que lo sujeta y el ligamento periodontal sufren una pérdida progresiva hasta llegar a su fase más avanzada. Así de primeras, suena muy alarmante pero lo cierto es que se trata de una enfermedad silenciosa que va evolucionando sin darnos cuenta porque no duele.
El origen de la piorrea es la acumulación de bacterias en las encías que desencadena en una infección en la que influyen el tabaco, el estrés, el consumo de algún medicamento que disminuya la producción de saliva (imprescindible para controlar la cantidad de bacterias que se depositan en la boca), la diabetes y factores genéticos que hacen que algunas personas sean más propensas que otras a padecer piorrea.
A lo largo de los artículos que escribimos en este blog, os habréis dado cuenta de la influencia tan negativa que supone el estrés para nuestra salud bucodental. Tenedlo siempre en cuenta.
Al estar hablando de una patología en su fase más avanzada, es crucial detectarla a tiempo para evitar la pérdida de las piezas dentales como hemos comentado anteriormente. Si es una enfermedad que no duele, ¿cómo detectarla a tiempo?, ¿cuáles son sus síntomas? Lo vemos.
¿Cuáles son los síntomas?
Al haber una inflamación y enrojecimiento de las encías, el síntoma principal es el sangrado sobre todo en el momento del cepillado de dientes. Esto es una señal inequívoca de que existe una alteración en las mismas y en este caso, inflamación. Recordad que las encías sanas no sangran.
Además del sangrado, cuando el hueso empieza a desgastarse y, por tanto, pierde fuerza para sujetar el diente, notaremos que los dientes parecen más largos debido a que la encía está perdiendo tamaño. Huecos entre los dientes, sensibilidad a los cambios de temperatura, mal aliento permanente, dolor al masticas los alimentos o movilidad dental son otros síntomas a los que debemos prestar mucha atención. De hecho, la movilidad dental es la principal señal de que la piorrea ha hecho acto de presencia.
¿Cuál es su tratamiento?
Ante la aparición de estos síntomas, sobre todo este último, por favor acude al periodoncista, el especialista en piorrea, no lo dejes pasar más tiempo. Cuanto antes actúe tu odontólogo, menos probabilidades habrá de pérdida de piezas dentales.
La radiografía dental determinará el nivel de la periodontitis, si el hueso alveolar está afectado, así como el tejido.
En líneas generales, el tratamiento es con antibióticos para combatir a las bacterias de forma duradera y reducir la inflamación. A continuación, serán necesarias limpiezas dentales profesionales cada tres meses y, posteriormente, cada seis. Asimismo, a los pacientes que sufren piorrea les realizamos un curetaje dental o raspado de las encías para eliminar cualquier bacteria que haya quedado adherida.
¿Cómo evitamos la aparición de la piorrea?
Como solemos decir en casi todas nuestras recomendaciones, la alimentación sana y una buena salud bucodental diaria evita la aparición de muchas enfermedades y la periodontitis o piorrea es una de ellas.
El cepillado de dientes diario después de las comidas es fundamental, así como una limpieza profesional realizada por un especialista una o dos veces al año para eliminar el sarro acumulado en los espacios interdentales.
Espero que este artículo haya respondido tus dudas. No dudes en visitarnos si te percatas de la aparición de los síntomas mencionados en tus encías y dientes. Como siempre decimos, prevenir es curar y, en este caso, cobra aún más importancia.
Estamos a una sonrisa de ti.
Hasta pronto 😊