Escrito por la Dra. Natalia García.
Nos metemos de lleno en el verano, llegan las vacaciones y con ellas jornadas de diversión en la playa, excursiones por la montaña o sencillamente nos sentamos en una terraza o en un chiringuito a tomar algo con amigos y familiares.
Todos son planes muy apetecibles y placenteros tras una larga temporada de trabajo con rutinas diarias muy marcadas. Pero mucho ojo porque en esta época del año dejamos el cepillo de dientes en casa y nos olvidamos de hábitos muy saludables para nuestra salud oral.
Si nos paramos a pensar… ¿mis dientes sufren más en verano?, ¿existe un mayor riesgo de sufrir alguna enfermedad bucodental?, ¿qué cambio de hábitos se producen en verano poco recomendables para nuestros dientes?
La verdad es que, aunque no nos demos cuenta, las altas temperaturas propias de estas fechas afectan directamente a nuestra salud oral.
La ingesta de bebidas muy frías (muchas de ellas con abundante azúcar) y el cambio de hábitos de higiene dental diaria y de alimentación provocan la proliferación de bacterias en nuestra boca y, por tanto, la de enfermedades bucodentales como las caries, según advierte el Consejo General de Dentistas de España.
Os voy a dar una serie de recomendaciones y algunos gestos que debéis evitar para que vuestra salud oral os acompañe en vuestras vacaciones.
- El 66% de nuestro cuerpo es agua y necesita un mínimo de dos litros al día sobre todo en verano. El calor favorece la deshidratación constante y tenemos sed que paliamos con bebidas muy frías, azucaradas o altamente carbonatadas que son perjudiciales para nuestros dientes. Os recomiendo que las sustituyáis por agua para mantenernos hidratados. Y es que, al deshidratarnos, salivamos menos y, por tanto, la saliva pierde parte de su capacidad de desinfección local. De este modo, las bacterias campan a sus anchas por nuestra boca provocando la aparición de gingivitis y periodontitis.
- En la medida de lo posible evitad fuertes contrastes de temperaturas en la boca tanto con bebidas como con alimentos (muy frío frente a muy caliente) porque podemos notar cierta sensibilidad con los cambios bruscos de temperatura. Dejemos que nuestra dentadura se aclimate entre uno y otro.
- La buena costumbre del cepillado diario de los dientes la dejamos en casa cuando nos vamos de vacaciones y también debemos meterla en nuestra maleta. Algunos estudios apuntan que uno de cada cuatro españoles deja de lavarse los dientes de manera total o parcial. El problema, según indica el director médico de Laboratorios Lacer, Javier Mira, es que el olvido de los buenos hábitos se produce cuando ingerimos más bebidas azucaradas y comemos más helados.
Para concluir este post me gustaría recopilar estas ideas en una sola. Cuidad vuestros dientes mientras disfrutáis del verano con quien más queréis. Una boca y un cuerpo sanos os permitirán pasadlo en grande.
¡Ah! Que no se me olvide recordaros que os esperamos en la clínica OROA después del verano. Es recomendable que vengáis a consulta a la vuelta de las vacaciones porque ya sabéis que prevenir es curar.
Hasta el próximo post y …
¡¡Feliz verano!!